Sodefesa descarta, por ahora, despidos, pero quiere rebajar sueldos y suprimir pagas extras y complementos.
La Sociedad de Desarrollo y Fomento del Empleo del Ayuntamiento de
Mairena del Aljarafe (Sodefesa) ha comunicado a su plantilla la apertura
de un periodo de consultas para negociar un "ajuste" destinado, según
el gobierno municipal del PP, a eludir que la empresa entre en concurso
de acreedores y acabe siendo liquidada. Este ajuste contempla "medidas
de carácter temporal" como una reducción lineal de salarios, la
supresión de la paga extraordinaria de noviembre y de complementos
personales e incentivos, reducciones de jornada y la "suspensión
temporal de empleo de cuatro trabajadores".
Luis Pelegrí, concejal de Empleo y vicepresidente de Sodefesa, afirmó ayer en un comunicado que "la empresa municipal está abocada a solicitar un concurso de acreedores ante la grave situación de su tesorería, por lo que con las medidas propuestas tratamos de evitar el concurso, que sería más perjudicial para los trabajadores". Pelegrí defiende que este ajuste no contempla despidos, toda vez que "la propuesta no es cerrada ni definitiva, pues la empresa está abierta a un sincero diálogo, así como a una franca y leal negociación con los representantes de los trabajadores, para alcanzar un acuerdo que permita, en la medida de lo posible, atenuar o reducir los efectos perjudiciales para los trabajadores". Las medidas propuestas tienen una duración prevista de dos años desde el próximo día 1 de julio.
La memoria de esta operación, según Pelegrí, justifica las medidas en "causas económicas, productivas y organizativas" bajo la premisa de que desde el año 2000, Sodefesa "ha venido alternando ejercicios positivos y negativos cuyo resultado ha dependido directamente de su actividad inmobiliaria". Dado que "la actividad inmobiliaria se convirtió en la principal fuente de ingresos de la empresa", la debacle del sector de la construcción se ha traducido, por lo que a Sodefesa se refiere, en "una asfixia financiera paulatina" que ha provocado dificultades en la venta de los productos inmobiliarios que aún quedan en la cartera de la empresa, habiendo tenido que "optar por el arrendamiento de VPO y de locales ante la casi inexistente demanda para la compra".
Igualmente, la memoria señala el "alto pasivo bancario" de Sodefesa, valorado en 6,5 millones de euros, por operaciones que el Gobierno municipal del PP atribuye a los anteriores gestores socialistas y "las dificultades para iniciar nuevas líneas de negocio rentables, dada la creciente atonía general del mercado desde hace años". Así, la empresa arrojó en 2012 un resultado negativo con previsiones de repetir este resultado en 2013.
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